Otro año mas, el ayuntamiento, que es el que a fin de cuentas el que paga, nos ha sorprendido con un espectacular festival de fuego, luz y sonido, aunque para poder escuchar las narraciones hay que estar muy cerca, pero como los dan en diferido por televisión, se puede escuchar, tanto la música como los poemas que recitan y las imágenes que algunas veces proyectan sobre algún sitio.
Yo la verdad, prefiero verlos en directo pero un poco mas lejos, aunque no exento de poder contemplar todo su encanto, y es que a mi personalmente me gustan, y por eso os mando una muestra de los cuarenta minutos que duraron.
Se echó en falta un poco de aire para disipar el humo que se iba formando alrededor de las explosiones, claro que en contrapartida, no pasamos frío.
Debió de ser una gozada el verlos, además si hacía bueno un lujo el estar al lado de la playa y con ese cuarto creciente de luna que había.
ResponderEliminarUn lujo no, un lujazo, porque estaba en unas rocas casi en el mar y casi casi en primera fila. La pena fué como dije que no hubiera un poco de aire, porque así hubiera sido genial, claro que igual me hubiera mojado.
ResponderEliminarLo de la luna es que ni me fijé, pero supongo que estaría así.