Hoy como todos los años, el concello nos ha obsequiado con el festival aéreo. Yo siempre digo que lo trae para festejar mi cumpleaños, pero va a ser que no es por eso.
Este año han venido un montón de aviones, con decir que el espectáculo empezó a las nueve y media y terminó a las tres de la tarde, lo dice todo.
Los que mas sensación causan son la patrulla aguila, que como siempre actúan al final, cuando la mayoría de la gente está comiendo. Y la verdad es un poco triste que la mayoría de la gente no pueda disfrutarlo, porque es digno de ver, como son capaces de hacer tantas piruetas en el aire.
Este año también vino una americana con una avioneta que hizo lo que no está en los escritos, porque casi nos mareamos de verla en tierra, así que allá arriba..., no quiero ni pensarlo.
Otro que llama mucho la atención es el B-52 americano, y no por sus piruetas, sino por su gran tamaño, y lo silencioso que es, o el apagafuegos como vulgarmente lo llamamos, que ojálá nos hubiera echado el agua por encima, porque lorenzo a esas horas ya apretaba.
También gusta mucho el eurofigther, que este año no rompió la barrera del sonido, pero no dejó a nadie sin asombro las piruetas, lazos y looping con las que nos degustó.
Los helicópteros fueron otro fuerte del espectáculo, representados por portugueses, italianos y españoles del ejercito del aire y de la armada, que hicieron un simulacro de rescate desde el mar y muchas otras maniobras.
En fin, un espectáculo que para el próximo año espero volver a ver y al cual os invito.
