Hoy me llama la atención las marchas de ayer en varias ciudades del país en contra de la propuesta del gobierno de atrasar la edad de jubilación a los 67 años.
La medida que en sí no es popular, evidentemente tiene que tener un transfondo que yo no me voy a parar a analizar. Lo que me llama la atención es que muchos de los partidos que se personan en contra de la medida, tienen en sus filas y en activo a gente con más de 65 años. Si no os lo creéis, sólo tenéis que fijaros en el presidente honorario y permanente del PP, que es senador vitalicio, y que a sus 87 años sigue ahí, ocupando un puesto que parece que es suyo. ¿Porqué para él y todos los diputados y senadores, amen de los secretarios, subsecretarios y demás tropa, no existe eso de la jubilación a los 65?¿Que pasa que si la silla es más cómoda te corresponde más tiempo?
Vale que la medida no sea buena. Habrá que analizar que determinados trabajos pueden o no pueden, y en qué condiciones. Yo añadiría que se haga con carácter voluntario y excepcional y por supuesto sin sobrepasar los 67 y a esa edad se pase a la jubilación sin excepciones, de rey a paje, y todo lo que sea trabajo a partir de esa edad que sea sin renumeración, y si quieren crear el consejo de ancianos como órgano consultivo, pues que lo creen, y que asesoren, pero jubilados.
Hay que dejar trabajar a los jóvenes, sin olvidar que también hay que cuidar a nuestros mayores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario