A VUELTAS CON LA HISTORIA

El pasado día 18 se retiró del centro de Herrerías, donde se ubica el museo naval, en Ferrol la estatua ecuestre de Franco que durante 35 años presidió la plaza de España de la ciudad y otros ocho en dicho centro, donde muchos curiosos acudían a fotografiarse con ella, y que después de muchas avatares con gente a favor y gente en contra, después de haber sido pintada de color rosa, etc..., la Ley de Memoria Histórica hace que desaparezca también de donde estaba ubicada, y para ello la trasladaron, por supuesto a puerta cerrada y por acceso restringido, a un almacén de repuestos de la Armada, y posteriormente tapada con una lona de color gris, para que no se vea.

No se si el legislador de la ley, pensaría la cola que traería y la cantidad de dinero innecesario que se está gastando en quitar o intentar borrar parte de la historia que para bien o para mal y pese a quien pese ha ocurrido, y una cosa es intentar resarcir a todos los olvidados durante una época y otra intentar borrar a los que borraron dicha época. Resulta que ahora vamos a cometer el mismo error que cometieron los anteriores.

¿No hay medida en la aplicación de la ley, o hay una intencionalidad desmedida?

A mi me parece que, como dicen algunos, si levantara la cabeza, la volvería a meter dentro por no ver lo gilipollas y absurdos que nos hemos vuelto.

Un poco sobre la estatua.
La estatua ecuestre de Franco fue realizada en 1967 por Federico Coullat-Valera. Es de bronce, mide más de 6 metros y pesa 7 toneladas. Franco se negó a inaugurarla por su fealdad y desmesura. Fue retirada de la Plaza de España de Ferrol para construir un aparcamiento. Pasará a formar parte del Centro Cultural de la Armada pero de momento permanece tapada para no herir sensibilidades.